Este curso se ha diseñado para dotar al individuo, al equipo de empresa o deporte incluso a los componentes de un entorno familiar, un conjunto de herramientas para aumentar su fortaleza, mejorar sus capacidades y acrecentar su potencia, todo esto con el objetivo de que pueda mejorar su situación social, económica, psicológica o espiritual.

Cuando nos preguntamos cómo podemos desarrollar nuestra confianza, autoestima y auto concepto, cuando queremos creer en nuestras capacidades o potencial y en la importancia de las  acciones y decisiones que van a afectar a nuestra vida positivamente, pensamos en la palabra empoderamiento.

Cuando queremos hacer valer nuestro rol y mejorar nuestra situación en términos de derechos sociales, laborales y productivos, pensamos en la palabra empoderamiento.

Empoderarnos significa reflexionar y responsabilizarnos de nuestro propio comportamiento y cambiar las pautas habituales si es necesario.

Cuando alguien dice que no puede cambiar porque siempre ha sido así, no se da la oportunidad de empoderarse, por lo que nada va a cambiar y todo continuará como antes.

En el curso aprenderemos a reconocer como la toma de decisiones propias o de otros  afectan nuestro trabajo, nuestras relaciones sociales y familiares y finalmente como percibimos nuestra existencia.

La empatía es  primordial para desarrollar unas relaciones más respetuosas y sanas con las personas con las que nos relacionamos, tanto a nivel laboral  como personal.

Solo a través de la empatía podremos reconocernos en los otros y reflexionar sobre nosotros mismos, lo que nos lleva a ver la importancia de distinguir si lo que hacemos y como nos comportamos  viene de un sentimiento de culpa.

Si continuamente nos juzgamos y nos señalamos como culpables de lo que pasa a nuestro alrededor y nos quedamos anclados en esa emoción, paralizados, sin intentar salir con unas pautas de comportamiento diferentes, podemos sentirnos arrastrados a lo más profundo de un pozo, donde todo lo que sentimos es malestar emocional y físico, llevándonos a niveles muy altos de estrés, uno de los motivos más comunes de riesgos laborales en la empresa.

Es imprescindible el parar y empezar a reflexionar sobre lo que nos hace sentir culpables.

A partir de ahí es necesario aprender a saber perdonarnos, ya el perdón nos libera y a desarrollar  nuestros propios recursos y  nuevas herramientas para conseguir los objetivos que nos hemos marcado. Cambiaremos hábitos viejos por unos nuevos que no interferirán en el bienestar tanto profesional  como familiar.

Debemos hacernos preguntas poderosas y significativas ya qué si no sabemos el significado de nuestra vida, nuestra misión o para que sirve lo que hacemos, va a resultar muy difícil empoderarnos y liderar a otros, incluso mentorizar a los miembros de nuestro equipo que lo necesiten.